domingo, 19 de agosto de 2012
Saborea la vainilla
Mis poros suspiran por ti. Por los tuyos. Quieren volver a sudar como aquella tarde calurosa. El tacto de tu piel contra la mía; fuerte, al compás de los gritos. Palabras sueltas que intentan prometer cosas; ahora no es momento de promesas, ahorratelas y continúa mirándome con esa mirada de deseo. Muévete. Cambiemos. No paremos. Somos uno, pero a mi no me basta quiero que seas mío estar siempre así, contigo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario