- ¿Esta noche sales?
- Que va, me quedare en casa.
- Que soso, yo que tenía pensado
proponerte algo.
- A ver sorprendeme.
- Podríamos
visitar la Luna y tumbarnos sobre su arena contando todas las luces que vemos
en Tierra. Multiplicando por dos cada sonrisa que soltemos a mitad de la
conversación, por imaginarnos que nos comíamos la boca al final de cada palabra
pronunciada. Y bueno, podríamos pasarnos por algún bonito restaurante de la
costa Italiana, compartir un plato de espagueti a la carbonara, seríamos los
nuevos enamorados del barrio. Abrazarnos hasta amanecer entre las cuatro
paredes de un Motel del km 69. Nada, simplemente perdernos un rato, lo que se dice una cerveza y para
casa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario